Miles de almas celebraron la fiesta del Violinero en Olímpico
|Nota: Omar Estanciero ||Foto: Terraviva.|
La peña que es un ritual en el marco de la fiesta de la abuela Carabajal, llenó de color y alegría en La Banda.
Con gran presencia turística, la fiesta de la abuela María Luisa Paz de Carabajal tuvo su cierre de domingo con la Fiesta del Violinero del club Olímpico, con mucha gente bailando y cantando, después de dos años de ausencia tras la pandemia.
La cordobesa Karen Quiroga rompió el hielo de la noche, con su power trio. La joven artista proveniente de la ciudad de General Cabrera (Córdoba) dio el puntapié inicial con variantes de folk y el rock, todo en una misma propuesta de fusión que despertó la atención de todos al inaugurar la peña.
Quien por primera vez estuvo en el Violinero, y después de mucho tiempo en un formato de peña, fue Martín Paz, quien tuvo una gran perfomance, repasando varios clásicos de su autoría, con la gran sorpresa de invitar a Marcelo Toledo a cantar a dúo.
Otro de los artistas que por primera vez pisó el escenario fue Hernán Nieto, cantante platense que heredó de su padre el “Chango” Nieto, el amor por la música folklórica y a pisar fuerte con sus raíces salteñas.
El organizador de la peña que ya es un ritual en el club Olímpico, enloqueció a todos con chacareras, gatos y zambas que invitó a bailar sin parar. Néstor Garnica, con un trío de violines y orgulloso de pisar nuevamente tierra santiagueña, agradeció a todo el público presente y a los artistas amigos que apostaron por la propuesta.
Horacio Banegas con Jana y el Mono, se tocaron lo mejor de su repertorio y el acompañamiento sampleado de sus temas que llevó a todos a bailar, con el clásico “pogo sachero”.
El cierre a pura fiesta y sin que se mueva un alfiler, estuvo a cargo de Juanjo Abregú, con mucha potencia norteña, dando el cierre al clima peñero y bien tradicional junto a La Típica Santiagueña y Luisa Galván, con mucha gente aclamando por estos músicos que dejaron todo en el escenario.
