El río, su gente y su cultura, marcaron el pulso poético de Santa Fe en Cosquín
|Nota: Omar Estanciero ||Foto: Prensa Santa Fe.|
Más de 50 artistas representaron a la provincia en el escenario mayor del folclore argentino.
La Delegación Oficial de Santa Fe hizo su esperado regreso al escenario del 64° Festival Nacional del Folklore en Cosquín, presentando una postal de talento y pasión por la música folclórica.
Más de 50 artistas representaron a la provincia en el escenario mayor, cautivando al público con una propuesta musical diversa y emocionante.
La actuación, titulada "La Poética del Río", fue una oda a la riqueza cultural y musical de Santa Fe.
El conjunto Proyecto Mate encabezó la propuesta musical, mientras que el Ballet Martín Fierro deleitó con su gracia y destreza en la danza folclórica. Además, músicos destacados de diferentes regiones de la provincia se unieron para ofrecer una experiencia única y enriquecedora.
Sonaron las obras más emblemáticas de Jorge Fandermole: “Oración del Remanso”, en una versión interpretada por el grupo Proyecto Mate que integran Nahuel Ramayo (batería), Agustín Casenove (guitarra), Esteban Mannarino (bajo), Luciano Stizzoli (piano) y Mauro Bertotti (voz), al que se sumaron el acordeonista acordeonista Javier Colli (Santa Fe), la percusionista Andrea García (Santa Fe) y las voces de Patricia Gómez (Reconquista), Myriam Cubelos (Rosario) y Luciana Rubio (Venado Tuerto).
La delegación estuvo dirigido por Ariel Sosa, el Ballet Martín Fierro logró combinar tradición e innovación, apelando a elementos simbólicos de la cultura litoraleña, a la historia de dolores y alegrías de la gente del río, del pueblo y la identidad santafesina.
Ante una Plaza repleta, el tercer y último bloque se nutrió de dos nuevas odas chamameceras: “Lo que sos mi chamamé”, de Miguel Angel Morelli, y “Jaaukanigás”, una composición de Mariano Peresón que, con letra de Gustavo Machado, dio cierre al concierto con su maravillosa síntesis de la vida en los humedales: “Santa Fe boreal, gente del agua, fluyó en vida y esperanzas, porque soy… Jaaukanigás”.
El repertorio celebró las vivencias y el paisaje ribereños, en una puesta escénica conmovedora. Dirigido por Ariel Sosa, el Ballet Martín Fierro logró combinar tradición e innovación, apelando a elementos simbólicos de la cultura litoraleña, a la historia de dolores y alegrías de la gente del río, del pueblo y la identidad santafesina.
A modo de despedida, el gobernador Maximiliano Pullaro y la comitiva santafesina recibieron la invitación para subir al escenario para recibir los ponchos coscoínos y hacer entrega del Poncho Santafesino a las autoridades del Festival. Detrás de escena, las artistas y los artistas de la Delegación abrazaron el regreso de la identidad santafesina al gran festival folklórico argentino: con el río como estandarte, Santa Fe volvió a Cosquín con su fluir de vida y esperanzas.