Néstor Garnica: “Con Malena somos violinistas compositores y nos gusta emprender desafíos al lado de la música”

El violinista bandeño contó a Terraviva del crecimiento profesional de su hija; la momentánea pausa con “La fiesta del Violinero”, para abocarse a nuevos proyectos.
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Tras su paso por Cosquín, el violinista bandeño Néstor Garnica se siente un agradecido de volver siempre a la “meca del folclore argentino”, no solo a la histórica Próspero Molina que le dio la consagración en 2004, sino al circuito de las peñas como lo hizo este 2025 con Añoranza Santiagueña y La Salamanca.
Aunque esta vez haya estado como invitado por Los Copla -una gran guitarreada santiagueña junto a Peteco, Horacio Banegas, Raly Barrionuevo y Orellana Lucca-, “el violinero del Apocalipsis” como alguna vez lo bautizaron, tuvo su temporada de actuaciones en el Teatro Acuario de Villa Carlos Paz, en lo que fue la peña de Los Duarte, para después visitar la movida de peñas en Cosquín, y saludar a viejos amigos de la escena musical.
“Con Pancho Cáceres -organizador de la peña Añoranza Santiagueña en Cosquín- hemos sido socios por muchos años, pero con la “Fiesta del Violinero”, que ya tiene 20 años, se me hace cuesta arriba continuarla como quisiera. Llegó ese momento en que dije ´vamos a parar un rato´, porque hay una familia que tengo que atender. Tengo 52 años, mi proyecto con Criollo (guitarra, bombo y violín) y no me puedo quejar de nada, porque todo lo que hice en la música lo viví a pleno. Quizá este año pueda hacer más teatro y no tantas peñas”, reveló el compositor en una entrevista con Terraviva.
“La Fiesta del Violinero” es la propuesta de peña folclórica itinerante que lleva Néstor a distintos puntos del país. Aunque comentó que quiere hacer un parate y atender otros proyectos, es consciente de su sueño siempre latente: “Yo no voy a parar nunca con la música, por hago mías las palabras del Bebe Ponti y Horacio Banegas: “…para cantar he nacido soy copla que el viento lleva…”, resume.
“La gira por Carlos Paz (Peña de los Duarte) estuvo bárbara las primeras dos semanas que estuve, y ahora salieron otras cosas que elegí continuar ya con mi proyecto”, confesó, siempre entusiasmado de sus giras y grabaciones con otros artistas.
El crecimiento de Malena Garnica
Si hay algo que a Néstor lo hace feliz, es el crecimiento permanente en distintas facetas que tiene hoy su hija Malena.
“La Male” toca el violín desde los 3 años y así me pasó a mí también. Empecé con una guitarra en casa y después fui por el violín”, cuenta orgulloso.
Néstor es consciente de la formación académica que desde pequeña tuvo Malena, pudiendo escalar y llegar a estar hoy, a sus 19 años, en la Orquesta Académica del Teatro Colón. “Lo lleva en la sangre, por supuesto que yo le inculqué y ella aceptó ese desafío. Desde el vientre de su madre que conoce el sonido del violín, y no me extraña todo lo que está haciendo”.
Malena Garnica comenzó con el método Suzuki desde su lugar nacimiento: La Plata (Buenos Aires); luego integró la Orquesta Juvenil de San Telmo y se sumó a la Camerata Académica del Teatro Argentino de La Plata. Concursó para ingresar a la Orquesta Juvenil Nacional, pudiendo hasta hace poco ser parte de una gira a Japón y muy pronto con actuaciones por Estados Unidos.
“Mi hija está haciendo su camino en Buenos Aires, con su carrera de música en el Teatro Colón. Me pone orgulloso porque más allá de su formación académica, no deja de lado sus raíces santiagueñas y le transmito siempre todo lo que aprendí. Somos violinistas compositores y nos gusta emprender desafíos al lado de la música”, explica, conmovido de un crecimiento que le sigue dando grandes emociones a su familia.
Nestor en el bombo, junto a Malena en violín y su tío Ítalo en guitarra en el Patio del Indio Froilán. (Foto: Fabián Carotti).
Foto portada: Yanina Pinto.